“La frecuencia de resonancia es aquella frecuencia natural a la que vibra cualquier materia con mayor amplitud”
Cuando tu yema mojada fricciona el aro de una copa de cristal y logras cierta cadencia, ésta canta. Lo hace porque estás excitando la frecuencia de resonancia del vidrio. Entre más llena esté la copa, más agudo cantará y deberás rozar el aro más rápidamente.
Una estrategia de comunicación exitosa comienza con un gran mensaje.
Al igual que sucede con la copa de vino, encontrar la frecuencia de resonancia de tu audiencia requiere conocer cómo se siente con respecto a aquellos temas en los que tú buscas incidir.
Inicia por reconocer su contexto actual, aquellos temas que le preocupan y que le ocupan. Un mapeo y el análisis de dichas emociones se refleja en el diseño estratégico de tus mensajes.
Mapear las sensaciones de tu audiencia significa acercarte a la conversación. Utilizar las herramientas disponibles complementa mas no sustituye a la inmersión humana para entender cómo se siente el público al que quieres alcanzar.
En 2018 un artículo de la Universidad Técnica de Ambato señaló en 2018 que la persona promedio está expuesta a 5,000 impactos publicitarios en medios digitales y tradicionales cada día. Esta cifra probablemente se incrementó durante los últimos años por el encierro derivado de la pandemia, aunado al efecto multipantalla de la tecnología móvil.
La tecnología actual permite llegar a tú público con mayor precisión con base en el mapeo y análisis de sus intereses y datos personales.
En Facebook un anuncio es capaz de alcanzar unos 1.95 mil millones de usuarios. Eso equivale al 32% de la población mundial mayor de 13 años. (fuente)
Han cambiado los canales y existe un constante torrente de nuevos formatos. La importancia de tener un gran mensaje prevalece.